La salud visual en los niños y niñas

    La visión es parte fundamental del desarrollo de los niños y niñas, es a través de este que comienzan a reconocer el ambiente que lo rodea. Cuando el niño nace, aunque las partes del ojo están prácticamente formadas, la visón es deficiente y sólo se va desarrollando con la estimulación y el paso del tiempo.

    El desarrollo de la visión es lento y acompaña cada etapa del desarrollo psicomotor, proceso que comienza desde el nacimiento y acaba más o menos hacía los 8 o 10 años de vida.

    Cualquier alteración ocular en este período, puede dejar una pérdida irreversible de la visión. Por tanto es importante llevar a cabo un permanente control de la visión de los niños y niñas en los primeros 5 años de vida.

    Para este desarrollo es importante:

  • Favorecer el desarrollo visual de los niños y niñas menores de 6 meses mostrándoles objetos de color llamativo y en movimiento.
  • Realizar el primer examen visual al año de edad, o antes si se presenta un problema evidente, esto, igual de importante como aplicarle una vacuna.
  • Realizar un control anual si los niños y/o niñas usan lentes.
  • Tener en cuenta requerimientos alimenticios como vitamina A (leche, hortalizas amarillas, hígado, pescado y yema de huevo).
  • Cocinar y lavar bien los alimentos antes de consumirlos especialmente la carne de cerdo y las hortalizas.
  • Realizar todas las tares con buena iluminación.
  • Ver la televisión a 3 metros de distancia y con la luz encendida.
  • Siempre tener las manos limpias.
  • No permitir que los niños manipulen pólvora, por inofensiva que esta sea.
  • Evita que los niños y/o niñas jueguen con palos, ramas, lápices, tijeras o dardos.
  • Evitar la exposición ocular directa a la luz solar y observación de eclipses.
  • No utilizar medicamentos o sustancias caseras no formuladas por el profesional competente.
  • Se debe tener en cuenta para la realización de exámenes visuales:

  • Si el padre, madre y/o hermanos son ciegos, o con ojos desviados.
  • Si padre, madre y/o hermanos utilizan anteojos permanentes.
  • Si durante el embarazo la mama del niño presento infecciones tipo rubeola, varicela, sarampión, toxoplasmosis o alguna enfermedad de transmisión sexual.
  • Bebes o niños con defectos congénitos en cara, pies o manos pueden igualmente tener defectos oculares en las estructuras internas del ojo.
  • Si los niños y/o niñas fueron prematuros o se encontraron en encubadora
  • Si hay alteración en forma o movimientos oculares.
  • Signos de alarma que pueden evidenciar que existe un problema ocular y/o visual:

  • Al tapar uno de sus ojos el niño y/o niña se incomoda.
  • Movimientos no coordinados cuando le mostramos un objeto y lo movemos de un lado hacía el otro.
  • Reflejo de la luz fuera del centro de la pupila.
  • Uno o ambos párpados se encuentran caídos.
  • Ojos rojos, amarillos o con secreciones purulentas.
  • Opacidades.
  • Diferencia de color.
  • Pupilas irregulares, blanquecinas o no reaccionan a la luz.
  • Si se acerca mucho a la lectura o la Televisión.
  • Si presenta dolores de cabeza después de alguna actividad visual.
  • Si tiene problemas de aprendizaje.

Realizado por: Elena García Bolado
Líder de Planeación y Calidad
Optómetra – Especialista en Cuidado Primario Ocular